viernes, 29 de octubre de 2010

Entre el más alla, y el menos acá

Llora la ciudad, como llora el ferviente enamorado la pérdida de su líder.

Muchos se dieron cuenta recién ayer, que el paso a la inmortalidad, le valió el mote de Líder; tantos otros, tras estas 48 horas de congoja generalizada, pudieron apreciar que quién partió sin duda alguna, siguió el legado de Juan Perón.

Se atrevió este querido pingüino a pararse frente a apatrias que solo querían perpetuar el yugo, al cuál el neo liberalismo nos había acostumbrado. Difícil se le hizo construir la Patria Grande que tanto Bolivar como San Martín soñaron, cuando resultaba más fácil alejarse del eje Caracas-Brasilia-BsAs, y permitir bases norteamericanas en territorio nacional.

Hoy este entrañable estadista, estará jugando cartas con el Che, con José Martí, con Tupac, con Salvador Allende, estará aprendiendo todavía de la retórica del General, le contará que la lucha en los ´70 no fue en vano; hablará de ferrocarriles con Scalabrini Ortiz, y sin dudas pondrá posturas en común con Jauretche sobre los medio pelo en la sociedad argentina.

Le contará a Eva que él recogió su nombre, y lo pudo llevar como bandera a la victoria, con la cabeza bien alta.

El cielo, una vez más se serenará, y permitirá que un pequeño pedazo de este buen hombre, nos abrace, en cada día, en cada lucha, en cada defensa que debamos hacer de su compañera Cristina, porque defenderla a ella, será estar más cerca de él, de la persona que está abriendo caminos, para ser el Mito.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Hasta siempre...Presidente


En memoria a Néstor, y en solidaridad con Cristina

lunes, 25 de octubre de 2010

Sindicalismo oportunista

El sindicalismo se debe erigir como fuerza posibilitadora de la lucha de los más desprotegidos contra los pudientes, deber instruirse como la auténtica pesadilla de las corporaciones. Pero cuando el sindicalismo se engorda a si mismo, mejor dicho, cuando sus dirigentes abandonan la lucha social y se muestran como promotores del "status quo", cuando postergan los reclamos de sus afiliados y se convierten en empresarios, cuando tornan la lucha de clase en disputas de pobres contra pobres, el sindicalismo se termina convirtiendo en un motor posibilitador de flexibilizaciones laborales cruentas, termina criminalizando la protesta social, y le brindan un marco de ilegalidad. Tal vez como cobardía más extrema de esta forma anti democrática de representación laboral, se encuentra la muerte del militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra.

Mariano Ferreyra, no fue asesinado por el Poder Nacional, fue víctima de la impunidad que tienen ciertos dirigentes, para hacer y deshacer todo a su voluntad, inclusive la decisión que ejercen sobre la vida de los demás.

Mediante esta modesta reflexión, no pretendo ensuciar la lucha de los trabajadores y dirigentes que pugnan por una mayor justicia social, como así tampoco busco exonerar a ningún dirigente sindical en particular, por demás está decir que me exhorto a transitar en las veredas contrarias a la mafia sindical, que en este momento para mi entender, podría estar bien investida por el dirigente José Pedraza.

La única forma de que se deje de apañar estos accionares, sería mediante la correcta resolución de este crimen, que se encuentra falto de un dolor sentimental, de la congoja habitual que acompaña a estos hechos (salvo por supuesto, para el núcleo familiar de Mariano), y se enmarca simplemente en un suceso político por antonomasia propia, o por voluntades de otros.

miércoles, 13 de octubre de 2010

No Ernesto, Hijo de Puta no! Tal vez mercenario...

Mercenario, es aquel querido Ernesto, que fabrica editoriales, notas y artículos periodísticos tergiversando información para intereses personales y/o patronales. Aquellos que se bajan de la lucha por los Derechos Humanos, y se sienten hartos del "setentismo". Aquellos "temerosos" que por las noches no duermen, porque talvez resultan asesinados por un "bloguero extremista". Mercenarios, son los que piden reprimir la protesta social. Mercenarios, son aquellos y cada uno, de los que por hacerle el caldo gordo al patrón, ensucian su rúbrica. Mercenario sos vos, y tantos otros.